sábado, 8 de octubre de 2016

Remedios caseros para las hinchazones en los pies

Tener los tobillos y los pies hinchados es bastante común, especialmente en las mujeres y los ancianos. La acumulación de líquido en esta zona se denomina edema y puede ser tratada con remedios naturales.



Las razones por las que sufrimos los edemas son:

El sobrepeso
La formación de un coágulo de sangre en la pierna
Una infección en la pierna
Venas incapaz de bombear sangre al corazón
Pasar muchas horas sentado o de pie
Comer demasiada sal
No beber suficiente agua
El ciclo menstrual
El embarazo
El consumo de anticonceptivos o estrógenos
Insuficiencia cardíaca o hepática
Problemas renales



Baño de Salvia y romero:




Al entrar los pies en un recipiente con algún ingrediente adicional es muy bueno cuando llegamos a casa después de estar todo el día sentado o de pie durante nuestro trabajo.

Con tan solo 15 minutos al día puede descansar mejor y no sufrir la presión causada por la inflamación.

ingredientes:

5 cucharadas de salvia (50 g)
5 cucharadas de romero (50 g)
2 tazas de agua caliente (500 ml)

preparación:

Calienta el agua y colocarla en un recipiente adecuado (debe encajar los dos pies).
Echar y mezclar la salvia y el romero.
Introduzca los pies y dejar hasta que el agua se enfríe (aproximadamente 15 minutos).


Baño de agua salada:



Es la receta más popular si sufrimos de los tobillos hinchados. Podemos disfrutar de los beneficios de este baño, por ejemplo, al ver la televisión, leer un poco en el sofá o si estamos hablando de nuestro día con la familia.

ingredientes:

3 ½ cucharadas de sal marina gruesa (40 g)
2 tazas de agua caliente (500 ml)
2 tazas de agua fría (500 ml)

preparación:

Calienta el agua y colocarla en un recipiente adecuado.
Tome la mitad de la sal y remover hasta su disolución.
Introduzca los pies  y deje unos 10 minutos.
Secar los Pies y deseche el agua.
Llene el recipiente con agua fría y la sal restante.
Introduzca los pies y deje al menos 3 minutos.
El contraste de agua fría y caliente activa la circulación de los pies y los tobillos y reduce la inflamación.

Baño de menta:



La menta tiene muchas propiedades: es refrescante, diurética y anti-inflamatoria.

ingredientes:

3 cucharadas de hojas de menta fresca (30 g)
1 litro de agua

preparación:

Poner a calentar el agua y cuando hierva echar las hojas de menta.
Hervir por unos 10 minutos, retirar del fuego y dejar enfriar un poco.
Verter en un recipiente y, cuando la temperatura lo permite, introducir los pies.
Deja 15 minutos o hasta que el agua se enfríe.


Masaje con canela y clavo de olor:



ingredientes:

1 palo de canela
3 dientes
2 cucharadas de aceite de oliva (32 g)

Preparación:

Triturar los dientes con la canela  hasta que queden como un polvo fino.
Poner en un cazo y verter el aceite de oliva. Mezclar bien.
Caliente a fuego lento durante un minuto.
Dejar enfriar y se utiliza para masajear el área afectada.
Realiza movimientos circulares de abajo hacia arriba y no enjuagar.
Por la mañana enjuague con agua tibia.
Repetir todas las noches durante una semana.

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